Los líderes escolares experimentados, creativos y dinámicos son muy valorados en todo el mundo.
Dado que los colegios compiten a nivel académico, tecnológico, deportivo y en la recaudación de fondos, los directores de los colegios se han visto obligados a ampliar sus conocimientos y habilidades. El conocimiento de una asignatura concreta ya no es suficiente.
Los líderes de los colegios del siglo XXI deben ser visibles, estar informados y capacitados para manejar con éxito la complejidad derivada de los medios de comunicación y la tecnología.
Además, los líderes de los colegios deben unir la visión y pasión con la capacidad para defender los intereses de los diversos grupos de interés.