
12 jul. 2007
Se busca gestora
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Las diferencias de paridad femenina están relacionadas con lo antiguo o moderno del sector o empresa, casi como una ley matemática. Cuanto más del siglo XIX es la empresa o sector (construcción, petroleras, eléctricas, etc.) menor es la presencia de mujeres en puestos directivos, y en cuanto más del siglo XXI, mayor presencia femenina.
Por su naturaleza, las organizaciones del XXI demandarán cada vez más capacidades sociológicamente atribuidas a la mujer. La banca es un magnífico ejemplo de ambos casos. En la banca tradicional hay muchas menos mujeres en puestos directivos que en la banca moderna, que incluye las gestoras de fondos.
Éstas incluyen posiciones en las que es necesario construir relaciones internas en organizaciones complejas; alinear intereses muy diversos de clientes externos; trabajar con niveles de detalle muy altos y de tolerancia cero al error; gestionar información muy compleja que se genera en tiempo real; y combinar sensibilidad con pragmatismo.
Estos cometidos exigen características en las que las mujeres están mejor preparadas por aprendizaje social. Aunque ni todas las mujeres, ni por supuesto todos los hombre, son capaces de llevarlas a cabo.